Sira es una niña intrépida, algo boba y con aires de sofisticada mujer de mundo. Sin embargo, la vida decide que le va a enseñar una lección que la hará crecer de golpe.
Esa es la versión corta de mi sinopsis de un libro de 600 páginas, aunque me siento bien, lo terminé en mes y medio, fue regalo de navidad. Nuevamente nos centramos en la guerra, aunque el foco de esta historia tan particular es España, iniciando con la guerra civil y escalando a la segunda guerra mundial. Cuando lees el título sabes que la historia va a girar en torno a modistas y sastres, pero lleva un trasfondo impresionante y bello.
Iniciamos con Sira en España, como ayudante de doña Manuela, la modista más importante de todo Madrid. La madre de Sira era costurera en este atelier y como era lógico, la niña terminó haciendo las de mensajera.
El tiempo transcurre y la guerra golpea España y se trae consigo a quien estuviera de frente, la industria de doña Manuela sufre mucho más que todas, las mujeres ya no tenían los recursos ni el interés para dedicarse a sus vestidos, fiestas y trajes, los militares eran más importantes. Como se puede esperar, Sira y su madre pierden sus empleos y es hora de buscar otra forma de vida. Sira, hermosa como es, consigue enamorar al pobre Ignacio, más bobo que ella, pero extrañamente hábil el niño. Con aspiraciones a un puesto en la política madrileña, Ignacio convence a Sira de que intente convertirse en mecanógrafa y trabajar para el gobierno, la mejor opción en la situación en la que estaban, prontos a casarse. Pero ninguno de los dos contaba con que la lujuria de Sira podría más que su cariño y amor por Ignacio, y así se dejó llevar por la gracia y madurez de Ramiro, quien la convence de "invertir" su recién ganada herencia en un negocio en Argentina.
Como si fuera poco, el destino termina llevándolos a Marruecos, al protectorado español, donde Ramiro inicia una nueva vida, nuevos contactos y poco a poco Sira va quedando en segundo plano. Luego de eventos desafortunados involucrando una deuda con un hotel en Tánger, Sira se traslda a Tetúan, donde es encargada de buscar un oficio y juntar el dinero para pagar su deuda, con la ayuda de la loca de la mtutera, dueña de una pequeña pensión, montan un atelier donde se junta la crema y la nata de las mujeres instaladas en Tetuán. Inglesas, españolas, alemanas, francesas, con el apoyo de Jamila y su vecino gay, Sira logra salir de su pequeño cascarón.
Una vez instalada, es adoptada por Rosalinda, la amante de Luis Beigbeder, quien se converiría en Ministro de Asuntos Exteriores durante el reinado de Franco. Quien, enviciada por su independencia y su facilidad de adaptarse a cualquier situación, la lleva por un camino altamente desconocido por ella, involucrando códigos secretos, clave morse y espías.
Este libro sí se lo recomiendo a todos que lo lean, yo sufrí, reí y amé a Sira en todo su proceso de crecimiento, es un libro muy bien logrado y con este sí dije "quiero leerlo de nuevo".
Me cuentan qué les pareció.
